SOLICITAR ARQUITECTO MUNICIPAL

Mª Teresa García Guillán, concelleira do PSdeG-PSOE da Pobra do Caramiñal, integrada no Grupo Mixto, ao abeiro do disposto no art. 97.3 do R.O.F., para o seu debate na vindeira sesión plenaria, presenta ó Pleno unha moción solicitando a contratación dun Arquitecto.

EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

Para levar a cabo o desenvolvemento urbanístico de unha vila, ademais de contar con un planeamento moderno e adaptado ás necesidades actuais e á normativa vixente, é necesario que a Corporación Municipal estea asesorada por un Arquitecto Municipal. O seu labor é, ademais de asesorar aos membros do Goberno en materia urbanística, velar polo cumprimento do Plan Xeral, levar o control das licenzas urbanísticas así como a xestión urbanística e a disciplina.

Se ademais o concello –como é o caso da Pobra do Caramiñal- conta con un Casco Antigo e un elenco impresionante de Patrimonio Cultural e Arquitectónico, o Arquitecto debe ser quen de administrar sabiamente ese patrimonio e velar pola súa protección, asesorando en todo momento ao Goberno Municipal e informando aos cidadáns e cidadás.

Para todos estes traballos, o técnico municipal debe ser Arquitecto Superior, e a poder ser, especialista en urbanismo e patrimonio, coñecedor da normativa vixente en cada momento, intérprete especialista de unha complexa materia que se complica ano a ano coa publicación de normativas e leis que fan do urbanismo a maior especialización municipal.

Como é sabido, dende a chegada ao Goberno do grupo municipal popular, o Concello da Pobra do Caramiñal substituíu a figura de Arquitecto pola de Arquitecto Técnico (é dicir, aparellador), en réxime de contrato de servizos e a tempo parcial, con un horario de atención o público unicamente os luns e os xoves de 12 a 14 horas, é dicir, catro horas semanais, tempo insuficiente para atender as demandas dos cidadáns en temas urbanísticos, asesorar sobre o desenvolvemento do Plan Xeral e realizar os informes urbanísticos preceptivos para a concesión das licenzas.

Para máis, o profesional contratado polo Concello é un técnico de grao medio, con coñecementos limitados no campo do urbanismo e mínimos no de protección do patrimonio, que de catro horas non está case nunca para que os cidadáns poidan ver atendidas as súas dúbidas na interpretación da normativa.

Buscando información na páxina web da Xunta onde aparecen tódolos datos sobre o urbanismo dos concellos (http://www.planeamentourbanistico.xunta.es) atópome os concellos que contan con Arquitectos Municipais, que na comarca do Barbanza son:

Ribeira:	Celso López Martín,	Arquitecto
Boiro:	Emilio Piña Ordíz,	Arquitecto
Rianxo:	Eva López Nieto,	Arquitecta
Porto do Son:	Elsa González Villarino,	Arquitecta
Muros:	Pablo Castro Pais,	Arquitecto
Noia:	Lara Lozano Formoso,	Arquitecta

Tal e como sucede coas Directrices de Ordenación do Territorio, os únicos concellos de segunda, nos que unicamente non presta ningún servizo un Arquitecto Superior son: Outes, Lousame e A Pobra do Caramiñal, nos que os servizos técnicos están atendidos por un Aparellador, polo que outra vez máis dedúcese que este equipo de goberno aposta porque sexamos un concello de segunda ou que teñan pensado levarnos a unha fusión de concellos.

Debe saber que o Concello da Pobra do Caramiñal, na fusión de concellos que se produciu no ano 1868, pasou a comprender os municipios de A Pobra, Ribeira e Boiro. Conxuntamente con Noia e Rianxo, A Pobra foi un referente económico e social.

Por outra banda, tamén parece un contra sentido que un aparellador informe sobre obras maiores redactadas por Arquitectos e Enxeñeiros superiores, que ven sendo como se un enfermeiro supervisara os diagnósticos e tratamentos que o médico prescribe aos pacientes, ou como si na Pobra no centro de saúde en vez de ter médicos nos atenderan para todas as patoloxías unicamente os enfermeiros catro horas a semana.

Ademais, un aparellador non é un profesional cualificado para informar sobre ningunha figura urbanística, xa sexa estudo de detalle, plan parcial, proxecto de sectorización, etc.., que necesariamente esixen o informe de un Técnico Superior.

Por todo iso, este grupo que represento solicita a adopción do seguinte

ACORDO:

Que se proceda a contratación dun Arquitecto Superior para que os servizos técnicos municipais presten asesoramento cualificado a Corporación Municipal, vele polo cumprimento do Plan Xeral, controle as licencias urbanísticas e a disciplina e atendan os/as veciños/as e demais interesados/as  tódolos días da semana.

LA DERECHA Y LOS ANTIBIÓTICOS

La historia atribuye a Alexander Fleming el descubrimiento inicial sobre el que, trabajos posteriores, llevaron a la penicilina a ocupar un lugar preponderante en la medicina moderna. Dicen, quienes han escrito sobre el tema, que tal descubrimiento, en su fase inicial, ha sido un poco como resultado del encuentro del azar con la presencia de un observador, científico, para más señas.

Ante un proceso febril, cualquier doctor en medicina, antes de recetar un antibiótico o un antiviral, realizará diversos análisis en el cuerpo enfermo y preguntará al inquilino -del cuerpo- cuales son los síntomas. Donde le duele.
Probablemente, antes de conocerse la propagación del mal, sugiera realizar análisis -de sangre y orina- radiografías o algún otro tipo de pruebas. La gravedad de la situación será quien indique el procedimiento.

Si el enfermo está grave procederá a la hospitalización, y lo mantendrá estrechamente vigilado. En muchos casos las probabilidades de superación está en lo rápido y acertado del diagnóstico. Nunca es bueno dilatar la puesta en marcha de las medidas que contribuirán a superar la enfermedad. Tanto más, cuando ya se constata que ha llegado a la categoría de epidemia.

En las enfermedades que se propagan entre personas, o animales, siempre hay mecanismos sobre los que se transportan. El aire, el agua, utensilios, animales, pueden transmitir virus o bacterias, que infectan lo que colonizan. La sociedad, en los estados modernos, se ha dotado de mecanismos -protocolos- que afrontan cualquier reto, por delicado que sea la situación y peligrosa la epidemia. La salud, lo primero.

No será el azar y, probablemente, tampoco el encuentro con ningún científico, quienes lleguen a la conclusión de que, lo que viene en llamarse "crisis", no sea sino, nada más que una enfermedad. La primera prueba de que tal idea no es descabellada lo confirma el hecho de que haya adquirido categoría de plaga, y amenaza con extenderse a todas las economías del Planeta.

Ya nadie puede refugiarse en la falta de análisis y radiografías que ha provocado esto que llaman crisis. La génesis ha sido admitida en los primeras reuniones de lo que se conoció como "primeros esbozos de un gobierno mundial"; los "G", famosos, en sus versiones a 7, 8, 20 ó 22.
El mal tenía su origen en la desregularización, financiera y fiscal, promovida por las políticas neoliberales que arrancan el los gobiernos Reagan y Thatcher y culminan en las estafas interbancarias, que nacen de las hipotecas subprime y los mecanismos de protección de los causantes del desaguisado.

El tratamiento de choque ha supuesto la mayor movilización de fondos públicos que recuerda la historia. Los culpables se han hecho multimillonarios y han socializado las pérdidas, al trasladarlas a la mayor parte de la banca del mundo occidental. No solo han trasladado las pérdidas. También han trasladado los vicios: salarios deslumbrantes y política financiera especuladora. No hay nadie en la cárcel y bastantes de los culpables están en administraciones y organismos europeos o yankees.

La primera consecuencia que ha tenido -la enfermedad- es el contagio de las economías endeudadas -todas- y el bloqueo de cualquier tipo de financiación, que no sea la de recurrir "al mercado" como hacen -por imposición de la enfermedad- los tesoros públicos de los distintos países.
La banca, en buena parte de Europa, se encuentra entrampada en deuda pública y, en casos como el de España, en activos de difícil capitalización -vivienda- que algunas economías no pueden superar en el estricto marco de las políticas de control del gasto.
La falta de un banco central que no esté al servicio, exclusivo, de los diseñadores de la Europa de los mercaderes, es otra de las carencias definitorias.

Se alzaron voces de alarma que insinuaban la necesidad de reformar el sistema. El sistema, es un vocablo -amable- que usan los transmisores de la enfermedad, para referirse a la "arquitectura" del mal. Algo así como si al cáncer se le llamase, la enfermedad.

La banca española no hace, hoy, ninguna labor social y necesita del dinero del BCE -para especular con deuda pública, y sabrán ellos con que más- y las ayudas públicas para no ser declarada en bancarrota. Eso sería como declarar la defunción del sistema, que da sustento a la enfermedad.

Es como si los hospitales estuviesen dedicados a inocular virus, para mantener una epidemia.

El origen de la enfermedad está en las políticas ultraliberales nacidas en el seno de la derecha de los EE.UU y del Reino Unido. Ningún analista -decente- lo duda.

La desregulación ha permitido a los especuladores financieros entrampar al sistema mismo. La enfermedad ha contagiado al sistema y, lo peor del caso, es que "se encarga a quienes viven de la enfermedad ajena" que nos den el tratamiento.

La derecha -donde nace la enfermedad- se ha convertido en el transmisor, por impedir el tratamiento correcto. Lo dicen prestigiosos portavoces del sistema. No hay duda.

El antibiótico, que ataje el mal, deberá salir de otras fuerzas sociales.